Es una sencilla cuestión. El fútbol de nuestro paÃs siempre vivió una bipolaridad donde uno se encontraba mejor que el otro y los resultados deportivos equilibraban la balanza hacia un lado u otro.
Hoy dÃa el mapa de ruteo indica que uno de esos dos clubes es bombeado como forma de mantenerse a flote por parte de los organismos de la comunicación e información; y mediante estrategias marketineras (como regalar entradas) intentan levantar, literalmente, un muerto, como es hoy el equipo fundado en el año`13, que dÃa a dÃa incrementa sus deudas y se entrega al bajo precio de la necesidad, sumido en una nefasta red que incluye absolutamente de todo.
Si bien en nuestro Nacional las cosas no son homogéneas y totalmente calmas, sucede que fruto de una buena administración, de actitudes que buscan la cristalinidad por sobre la necesariedad y los triunfos inmediatos que acallen las crÃticas. Fruto de eso es que el pasado fin de semana, en nuestro templo, que continúa creciendo, y en breves se iniciará la ampliación que culmine la construcción de la hoy tribuna Abdón Porte (a quien recordamos tras la conmemoración de su fallecimiento el pasado 5 de marzo), para alojar asà al grueso de nuestra parcialidad. 29.000 fue la cifra, hoy ya superada; a punto de batir el récord histórico de socios en padrón, por el objetivo llegar a los 30 antes de fin de año, o más, firme en su economÃa con su patrimonio autóctono aún sin estallar en su plenitud, lo que asegura un par de años más de tranquilidad, teniendo una cantera de chiquilines de igual calidad a los que hoy militan ya por el primer equipo.
Cuestión de números, cuestión de datos; cuestión de sentimiento.
MatÃas MartÃnez








