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El padre clásico

Hablamos con Gonzalo Pérez, integrante de la Comisión de Historia y Estadísticas de Nacional, para hablar de Atilio García, el goleador más grande de todas las épocas. Un día como hoy pero de 1914, nacía el máximo goleador de Nacional, de los clásicos y del fútbol uruguayo. 


EL 3 DE ABRIL FUE EL DEBUT OFICIAL, PERO YA EN OTROS PARTIDOS HABÍA HECHO HISTORIA

«Una precisión: hoy lo que se da es el debut oficial. El debut de Atilio García en Nacional es el 15 de enero de 1938. Voy a hacer algún comentario muy particular: ya en esta fecha, el 3 de abril cuando se da el debut oficial por el Campeonato de Honor, ya Atilio García era casi un héroe en Nacional, por lo que había hecho en esos dos o tres meses previos que ahora voy a contar».

UNA ANÉCDOTA FAMILIAR IMPERDIBLE

«Arranco por el principio. Atilio nace en Junín, provincia de Buenos Aires, Argentina. Nace el 26 de agosto de 1914. Debuta muy joven en el equipo Mariano Moreno de la ciudad de Junín. Se da algo muy particular: el padre no quería que él jugara al fútbol, entonces jugaba escapado. En uno de los partidos se da una situación muy particular: el padre es el único que logró sacarlo de una cancha, entró con un bastón cuando se enteró que Atilio estaba jugando en la cancha de Mariano Moreno y Atilio se tuvo que ir corriendo. Al final los directivos de Mariano Moreno lo convencieron al padre, de que su hijo era bueno y tenía condiciones. Así se pudo hacer en el fútbol».

SU TRAYECTORIA EN ARGENTINA

«Después pasa a Platense, ya en Buenos Aires. Tuvo un pasaje muy breve, no le fue del todo bien, no se adaptó a la ciudad de Buenos Aires, y vuelve a Mariano Moreno. Después se da una posibilidad de ir a Boca Juniors a fines de 1936. Va a Boca y de a poco se empieza a gestar su carrera. En Boca jugaba en la reserva, el centrodelantero titular era ‘Pancho’ Varallo, una gloria».

LA LLEGADA A NACIONAL: UNA CORAZONADA DE ATILIO NARANCIO

«Nacional venía de años muy complejos. En 1935 se pierde el campeonato de forma poco creíble. En 1936 se vuelve a perder el campeonato, en el 1937 también. Había una generación de glorias de Naciona, que integró la máquina de 1933, que de a poco había ido envejeciendo: los Nasazzi, Scarone, el ‘Manco’ Castro, Petrone. Había un recambio generacional que al club le costó mucho. En 1937 Nacional había traído un centrodelantero brasileño, llamado Cardeal. Las actuaciones de ese brasileño no habían sido nada buenas, le fue muy mal. Entonces cuando llega Atilio se cuestionó un poco, por qué Nacional iba otra vez a buscar un centrodelantero extranjero. El presidente de Nacional en 1938 era Atilio Narancio. Nacional tenía una relación institucional de amistad muy grande con Boca Juniors, la tiene aún hoy. Atilio Narancio va a buscar a Boca un centrodelantero para traer. Originalmente va a buscar a Providenti, un delantero muy importante, que Boca lo tenía dentro de los intransferibles. El presidente de Boca le da una lista a Narancio para que trajera a un jugador. En esa lista había uno que se llamaba Atilio García, a quien el presidente de Nacional no conocía. No era como hoy que uno puede tener referencias, ver videos. No fue un tema de ojo, fue intuición. Atilio Narancio dijo: ‘me lo voy a llevar porque se llama como yo y debe ser bueno’. Lo eligió a través de una lista. Llega en enero, totalmente en silencio, nadie lo conocía. Apenas algún anuncio en un diario diciendo que iba a llegar un delantero argentino a Nacional. Llega con una valijita a la sede, nadie lo estaba esperando. La sede quedaba en el centro. Fue hasta la cantina, le pregunta al cantinero, y el cantinero le dice: ‘ah, vos sos el argentino, vení, te llevo a la pieza y si querés dormí una siesta’. Esa fue la llegada de Atilio García a Nacional en enero de 1938».

EL TÉCNICO NO LE TENÍA FE, PERO EL «MANCO» CASTRO Y ROBERTO PORTA FUERON CLAVES PARA DARLE LA CONFIANZA

«Nacional debutaba el 15 de enero en un partido amistoso contra Chacarita en el Centenario. Atilio llega, sube a la pieza, durmió la siesta toda la tarde, se levantó un ratito antes del partido, casi hasta se pierde el debut. Llega al Estadio. En el primer tiempo hace un gol sin haber tocado antes la pelota. El técnico que era el escocés William Reaside, dice ‘vamos a sacarlo, ya está, lo ví y no me llamó la atención’. Y el ‘Tano’ [Roberto] Porta le dice: ‘no, no, momentito. El tipo es guapo, se sabe posicionar en la cancha, aguanta las patadas, la más chica se la dieron en la rodilla, vamos a dejarlo 45 minutos más’. Se venían dos cambios, iban a ingresar Aníbal Ciocca y Fernández. Entonces el ‘Manco’ Castro dice: ‘salgo yo, y que el argentino se quede a jugar el segundo tiempo’. Atilio juega el segundo tiempo y hace el gol del triunfo, y ahí empieza su historia en Nacional. Todo muy agarrado de alfileres».

EL NOCTURNO RIOPLATENSE, UN MOJÓN FUNDAMENTAL E HISTÓRICO

«Cuando debuta oficialmente el 3 de abril de 1938 ya era un héroe, porque entre enero, febrero y marzo de ese 1938 se juega el Campeonato Nocturno Rioplatense. Era un campeonato no oficial, si bien era mucho más prestigioso que muchos de los campeonatos oficiales. Ahí Atilio ya fue el goleador. Hace los dos goles en la cancha de Estudiantes, en la noche de las camisetas ensangrentadas, le hace los dos goles a Peñarol el día que se gana el título y se da la vuelta olímpica de ese torneo. Le hizo goles a todos los equipos. Realmente cuando llega su debut oficial, el 3 de abril de 1938, ya estaba metido en el corazón de la hinchada».

NÚMEROS DEMOLEDORES E INSUPERABLES 

«Es el más grande de todos, no hubo otro igual en el fútbol uruguayo. Te paso algunos breves números. Hizo 464 goles con la camiseta de Nacional. Obviamente no estoy incluendo prácticas. Goleador del Campeonato Uruguayo en 1938, 39, 40, 41, 42, 43, 44 y 46. Tiene en su palmarés 22 títulos oficiales conquistados, sin contabilizar los amistosos entre los cuales está el Nocturno Rioplatense del ’38, o la Copa del Atlántico del ’47. No va a haber otro igual».

AGRADECIMIENTO FINAL EN NOMBRE DE LA COMISIÓN DE HISTORIA Y ESTADÍSTICAS

«Ya lo hice personalmente pero les vuelvo a agradecer por la invitación a la fiesta. Fue una impresionante velada. Les mando un gran abrazo».

RESEÑA DE ATILIO GARCÍA:

Atilio García nació el 26 de agosto de 1914 en Junín, República Argentina. Fue el décimo hijo y comenzó a jugar al fútbol en el club Moreno de la localidad. Posteriormente juega en Platense y Boca Juniors. A fines de 1937, pide pase de Boca Juniors para Nacional.

Llegó a Montevideo el 14 de enero de 1938, y debuta al día siguiente en un partido internacional entre Nacional y Chacarita Juniors de Argentina por el Campeonato Nocturno Rioplatense. Gana Nacional por 3 a 2 convirtiendo Atilio sus primeros dos goles con la camiseta tricolor.

Aguerrido, temperamental, fuerte como un roble, cabeceador inigualable, el mejor definidor… en fin, Atilio era todo lo que debe ser un centrodelantero y más. Es el mayor goleador de la historia de Nacional: anotó 466 goles. Posee el record de goles en una temporada: 52 en 1938.

Es el máximo goleador de los clásicos: le convirtió 35 goles a Peñarol.

Goleador absoluto durante 8 años del Campeonato Uruguayo, siete de ellos consecutivos: 1938 (20 goles), 1939 (22), 1940 (18), 1941 (23), 1942 (19), 1943 (18), 1944 (21) y 1946 (21). Tiene el récord de haberle anotado 4 goles a Peñarol, el 8 de diciembre de 1940, partido que Nacional ganó 5 a 1.

Es protagonista de la mayor goleada clásica. El 14 de Diciembre de 1941 Nacional vence a Peñarol por 6 a 0, convirtiendo los goles Atilio García (2), Bibiano Zapirain, Luis Ernesto Castro, Roberto Porta y el restante Piñeiro en contra.

Campeón uruguayo 8 veces, en los años 1939 al 43, 46, 47 y 1950.

Integró el equipo titular del primer gran Quinquenio de Oro del fútbol uruguayo, obtenido por Nacional (1939 – 1943). Fallece en Montevideo, en el año 1973.

El más grande.

A continuación, compartimos los grandes registros que el gran Atilio García dejó para la historia y el recuerdo.
  • Máximo goleador clásico de Uruguay y de América: 35 goles
  • Récord de goles en un clásico: 4
  • Más veces goleador del Campeonato Uruguayo: 8
  • 24 títulos oficiales con Nacional
  • Maximo goleador clásico del Campeonato Uruguayo: 22
  • Participó del 6 a 0, la mayor goleada clásica de la historia, convirtiendo un gol
  • Participó de los 5 años del «Quinquenio de Oro» de Nacional, siendo goleador del Uruguayo en todos

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