PREOCUPA QUE LOS CONTRATISTAS SE SALGAN CON LA SUYA
Desde hace tiempo, existe dentro de Nacional un importante malestar por la forma de negociar (presionando) del contratista Pablo Boselli, director de la empresa GBG (Global Business Group), y representante de varios jugadores que han salido o están en las divisiones formativas del club: Alfonso Espino, Juan Manuel Sanabria, Guillermo May, Santiago Rodríguez y Axel Pérez, entre otros.
Existen muchos puntos por los cuales se puede concluir que la relación entre Nacional y este empresario está lejos de ser la ideal. Lejísimos de que hoy en día los negocios se hagan de la manera que al Decano le conviene, para su economía y para el bien de su futuro institucional.
En el caso del «Pacha» Espino, la preocupación radica en que hace dos meses se le trasladó una propuesta al lateral izquierdo y a su representante, para renovar el contrato que vence en diciembre de este año, pero la misma está «cajoneada». No han respondido aún y se teme que el «Pacha» se pueda ir a fin de año en condición de libre.
El del arquero Franco Israel y el punta Santiago Rodríguez son de los casos que más ha dejado molesta a mucha gente en Nacional. Estos juveniles de 18 años, integrantes de la selección uruguaya sub 20. Recientemente firmaron su primer contrato de mayor. Renovaron su vínculo con el Decano hasta diciembre de 2020 pero en condiciones no muy satisfactorias para el club, ya que lo hicieron con una cláusula de rescisión muy baja, de solo 1.200.000 dólares, vale decir que el contratista pretendía poner una cláusula aún menor, pero después varios meses de negociación al menos desde Nacional se pudo conseguir ese importe y fijar dos cláusulas más altas si cumple algunos objetivos,. Esa cifra puede ir «en crecimiento» de acuerdo a objetivos que el futbolista pueda ir cumpliendo en el futuro, como debutar en primera división, jugar una determinada cantidad de partidos y puede ascender a un máximo de 1 millón 900 mil dólares. Pero lo cierto es que hoy en día Nacional queda expuesto a que si alguien paga esa cifra de 1.200.000 de la moneda americana, se lo lleva. Hoy en día el 100% de su ficha pertenece al Decano. Lo más llamativo de esta situación es que el presidente José Luis Rodríguez ha manifestado en más de una oportunidad su intención de no incluir cláusulas de rescisión en los contratos de los juveniles, pero en este caso no lo cumplió. Además, nos dicen desde el club que este empresario presionó con que si no se firmaba el contrato bajo estas condiciones, es decir, con una cláusula de rescisión baja, se lo llevaba en condición de libre. Nacional cedió ante esa presión y aceptó la propuesta de contrato. Pablo Boselli exige siempre que todos los contratos tengan cláusula de salida, y la directiva del club no pudo ir contra eso.
Axel Pérez es otro producto de la Cantera Inagotable que es representado por Pablo Boselli. Tiene 16 años, juega de número 9 y nos dicen que es un gran goleador, con mucho futuro. Firmó contrato juvenil recientemente con Nacional, en negociación llevada adelante por el vicepresidente tricolor Álvaro Paz. Lo que preocupa en este caso es que el jugador se irá en los próximos días rumbo a España para realizar una pretemporada con el F.C. Barcelona de ese país. A la vuelta de ese viaje, tendrá que negociar su contrato de mayor con Nacional. Boselli lo lleva para que en el club español realicen «un scouting» del jugador, es decir, para que lo vayan conociendo. Este representante ha manifestado en varias ocasiones que prefiere que los jugadores uruguayos se terminen de formar en Europa, por lo cual su intención siempre es sacarlos hacia el viejo continente lo antes posible, algo que sin duda conspira enormemente contra los intereses del Club Nacional de Football.
Hay otros casos en los que también este contratista no actuó bien con Nacional, como el de Juan Manuel Sanabria, juvenil de 18 años que partió hace pocos días hacia el Atlético Madrid. En esa negociación algunos dirigentes tricolores quedaron disconformes con la actitud de Boselli ya que también presionó en llevárselo libre si no se aceptaba la propuesta del club español.
La preocupación dentro del club es muy grande, los hinchas expresan su descontento como lo han hecho en estos últimos días en nuestro programa de Pasión Tricolor. Ricardo Sacías, socio activo que estuvo en el banderazo y según nos dijo es asiduo concurrente a los partidos de formativas, nos expresó el día martes 23 de julio claramente que «Pablo Boselli hace lo que quiere». También Marcelo Sosa, ex referente de «La Banda del Parque», nos dijo en el programa del miércoles 24 que «Lo de Boselli ya es impresentable, cómo sigue trabajando. Si hay políticos en Nacional que quieren al club no entiendo cómo dejan trabajar a un contratista que hace las cosas que hace con los jugadores que tiene en Nacional, en contra del club».
Lo cierto es que en el seno de la comisión directiva es hora de que se pongan firmes en el asunto y hagan respetar al club más grande del Uruguay. Lo que valoriza a los jugadores son sus condiciones y el vestir la camiseta más gloriosa, no ser representado por tal o cual contratista. Hay que imponer las condiciones y que las reglas sean claras para cuidar la economía y el futuro del club, y también la carrera de los futbolistas.