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Ayer vivimos una nueva edición del partido más esperado de nuestro fútbol. Las expectativas eran muchas por parte de los dos lados, se jugaba la tabla anual, el invicto de los del trece y la racha de clásicos sin perder por parte del tricolor frente a los del trece. Nacional logró uno de estos objetivos al empatar cero a cero, estiró a 6 los partidos sin perder contra peñarol y de esta manera le quitó los primeros dos puntos del Torneo, se paró firme y demostró que en la cancha hubo un equipo de hombres dispuestos a luchar como nadie lo había hecho.

El partido fue entretenido en el primer tiempo donde pudo haber sido para cualquiera, fue solo un tema de puntería y bien nos pudimos llevar la victoria. En el segundo tiempo el partido fue muy malo, la cancha es un desastre, pero Nacional quiso un poco más en todo momento. Al final, ellos festejaron el empate y nos fuimos masticando bronca por no llevarnos los tres puntos una vez más frente a los del trece. Cabe destacar que Martín Vázquez debió expulsar a Orteman en el primer tiempo y cobrar un claro penal en el segundo cuando el remate de Matías Cabrera da en el brazo de Alejandro González, pero bueno a esto también estamos acostumbrados.

La Colombes una vez más fue una fiesta de colores, la gente acompañó como siempre y los continuos cantos taparon los ruidos molestos que salían de la tribuna de enfrente. Un desastre lo de la seguridad dejando entrar fuegos artificiales a Ámsterdam cuando se había acordado que se quitarían a la entrada, lamentable.

Quiero decirle al señor Da Silveira, quien quedó impresionado por el colorido de la gente de los del trece por la cantidad de globos, que Nacional hace no menos de 5 años que lleva globos, papelitos, banderas, humo y otras cosas que llenan las tribunas de color y alegría, pero se ve que este señor sólo mira para un costado del estadio. Felicitaciones a la gente de peñarol que está aprendiendo como es esto de hacer una fiesta en la tribuna después de tantos años de aprendizaje.

Para concluir, seis partidos sin perder contra los del trece, una buena medida para saber a que nos enfrentaremos en las finales, la tabla anual muy lejos, por lo que ahora a pensar en tres finales duras y ni que hablar a pensar en la segunda fase de la Libertadores, mejor plato no podemos tener por delante; así que bolsos ahora a apoyar más que nunca a la blanca y a dejar el corazón en cada grito.

Les mando un tricolor abrazo a todos en cualquier parte del mundo.

Matías

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