LA PRIMER HINCHADA DEL MUNDO
El 28 de Abril de 1882 nacía en Montevideo don Miguel Prudencio Reyes, y con su llegada a Nacional nació una nueva forma de vivir el fútbol, de vibrarlo, de sentirlo, de amarlo.
Miguel Prudencio Reyes Viola
Montevideo, 28/4/1882-7/2/1948
EL “HINCHA PELOTAS” DE NACIONAL
A principios del siglo XX, el ambiente en las canchas era un poco diferente a como lo conocemos hoy en día. Durante años, el fútbol rioplatense fue asunto de ingleses, por lo que se practicaba con el clásico estilo anglosajón, mas bien formal, que solían tener para los demás deportes importados de su tierra, como el rugby, el cricket, el hockey, el golf, el tenis o el polo. El público que asistía a los encuentros mantenía cierta seriedad y una postura en general recatada.
En esa época, llegó a Nacional un talabartero llamado Prudencio Miguel Reyes. Reyes era un robusto paisano que acompañaba al equipo y realizaba las trabajos de utilería, pero su principal función era «inflar» las pelotas, o como se dice en lunfardo rioplatense «hincharlas».
Sin embargo, el destino de Reyes en la historia quedaría marcado mucho más allá de simplemente hinchar los balones
Orgulloso de su función y de su activa participación en la causa tricolor, llegaba al Parque Central, inflaba ostensiblemente las pelotas Nº5 “Made in England” confiadas a su custodia, y desde el pitazo inicial y a lo largo del partido se dedicaba a alentar constantemente a su cuadro. Sus gritos “¡¡Nacional, Nacional!! ¡¡arriba Nacional!! ¡¡Vamo’ arriba Nacional!!» eran una nota constante en el devenir del encuentro.
Al estupefacto público que asistía a los partidos de fútbol en el 1900 le resultaba extraño que Prudencio se paseara de punta a punta, al borde de la cancha, alentando a los jugadores, lanzando gritos con su vozarrón y generando un clima hasta entonces inédito
Tan insistentes eran las ruidosas demostraciones de Reyes, que allegados y visitantes se preguntaban: “¿y ese quien es?”… La respuesta era unánime…“Ese es el hincha”…. “El hincha pelotas de Nacional”.
El “hinchador” de Nacional ya formaba parte del espectáculo… “¡Mira cómo grita el hincha!”
Don Prudencio fue justamente quién rompió con la seriedad reinante, armando un clima mucho más festivo, que enseguida prendió en los asistentes y se hizo popular.
Poco tiempo hizo falta para que los gritos de ánimo de Reyes no fueran en solitario y para que a él y a sus compañeros en la grada se les conociera como hinchada
La palabra hincha se fue aplicando a los partidarios del Nacional que más gritaban en los partidos; más tarde se extendió a los demás y, finalmente, a los partidarios de todos los clubes.
Miguel Prudencio Reyes posando con el primer team de Nacional en 1914
Poema del Dr. Ricardo Forastiero Fernández dedicado al primer hincha de la historia
SU VIDA Y SU ACTIVIDAD PARTICULAR
Poco se conoce aún sobre la vida, la familia y la actividad particular de este personaje casi mitológico. Por ello, queremos aprovechar este nuevo aniversario para dar a conocer algunas fotos, datos y documentos de Miguel.
Boleta original del comercio de Reyes. La “Lomillería y Talabartería Española” estaba ubicada en Avenida Goes 192/194 (actual General Flores 2437)
LA TALABARTERÍA EN LA ACTUALIDAD
Según la oficina de nomenclatura de la Intendencia Municipal de Montevideo, la emblemática talabartería, donde entre otras cosas, se reparaban los balones utilizados por Nacional, estaría enclavada hoy en el corazón de la barriada de Goes. El lugar exacto sería, General Flores 2437 entre Domingo Aramburú y Blandengues, a metros de la Estación
Comercios ubicados en la Esquina de General Flores y Domingo Aramburú donde otrora estaba la talabartería
Dos fotos de familiares. En la foto de arriba Miguel el día de su boda con esposa María Naya. En la foto de abajo posando junto con su esposa e hijos (China, Tota, Aníbal, Omérico y Osíris)
El mate con sus iniciales grabadas con el que don Miguel mateaba.
Documento original del Registro Cívico Nacional con la firma de Prudencio Miguel Reyes
Ser “Hincha” significa pasión, partidarismo sin concesiones, amor y adhesión a una causa. Eduardo Galeano, en su libro “El Fútbol a sol y sombra” dice que “jugar sin hinchada es como bailar sin música”.
Ese aporte de nuestro Nacional, el primer club criollo de América, consolidador de la identidad uruguaya en lo deportivo, sostén eterno de las Selecciones nacionales desde el 13 de Setiembre de 1903, tiene también en esta forma de vivir y sentir el fútbol, un rol de primera magnitud.
La potente matriz criolla y popular de Nacional se ve nuevamente reflejada en este aporte trascendente para la historia del fútbol mundial
«Hincha”: una pasión, una definición, una realidad hoy, algo sin lo que el fútbol no sería fútbol, que como todo elemento mitológico tuvo una realidad humana: el “Gordo” Miguel Prudencio Reyes.
El primer hincha de la historia, patrimonio Nacional
Comisión de Historia y Estadística
Club Nacional de Football